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Los funcionarios profesionales del departamento de agricultura en Sierra Leona debían pasar cada mes unos 25 dios fuera de su destino en Njala. Esta política garantizaba que estuvieran en contacto con agricultores y comerciantes y se familiarizaran con las condiciones de las zonas rurales. El primer encargo del funcionario cuya labor se comenta en esta sección consistió en ayudar a mejorar la calidad de los productos tradicionales de exportación.
Sierra Leona era entonces el exportador principal de piasavá, fibra dura de 60 a 90 cm de longitud que se extrae de las hojas de rafia. Se realizaron una serie de experimentos, seleccionando específicamente frondas de diversas edades y tamaños y de diferentes variedades de palma; también se hicieron ensayos para comprobar si las soluciones ácidas acelerarían el enriamiento y producirían fibras más limpias sin dañarlas, y ensayos de secado con calor artificial para la elaboración durante los períodos de escaso sol. Se llegó a la conclusión de que se podía producir la mejor fibra con buenos métodos tradicionales sin necesidad de medios artificiales.
El oficial de mercadeo fue luego enviado a Nigeria para estudiar e informar respecto a las novedades en materia de elaboración y comercialización de los productos del aceite de palma. Con la asistencia de la United Africa Company se había desarrollado un prototipo innovador de molino de aceite. Se trataba de un proceso sencillo que requería un recipiente para cocer el froto de la palma, una autoclave para extraer el aceite de palma y una máquina cascanueces. Estas tres unidades eran accionadas por un pequeño motor a vapor, que se alimentaba con cáscaras de nueces y fibras. El mérito del modelo desarrollado consistía en que extraía el 85 por ciento en comparación con algo menos del 50 por ciento que se obtenía con los métodos manuales. El paso siguiente fue identificar zonas en Sierra Leona con rodales naturales de palma suficientemente densos para abastecer este tipo de molino. En colaboración con los oficiales agrónomos responsables se seleccionaron 12 localidades. Un programa escalonado para la instalación de molinos y apertura de caminos para la recolección del froto de las palmas fue luego incluido en el primer Plan Decenal de Desarrollo de Sierra Leona.
Una función importante de los oficiales de mercadeo era el examen y aplicación de las normas de inspección de calidad aplicables a los principales productos de exportación: almendra de palma, jengibre en polvo, maní, ajonjolí, café, cacao y piasavá. El mayor problema fue cómo secar el producto en condiciones de limpieza, sin contacto con el suelo y libre de excrementos de cabras y aves de corral. La legislación estadounidense sobre « alimentos puros», era muy exigente en materia de adulteración del producto con excrementos animales. El menor indicio detectado al respecto daba lugar a que toda la remesa fuese seleccionada manualmente y el elevado costo de la mano de obra americana se cargaba al exportador de Sierra Leona. La práctica tradicional aprobada era extender las almendras de palma, el cacao, las vainas y otros productos en esteras de caña colgadas de palos a un metro del suelo. La campaña de los oficiales de mercadeo consistía en visitas a las aldeas de las zonas productoras para recabar el apoyo de los dirigentes locales. Si se observaba la existencia de productos que no cumplían las normas el inspector de productos denunciaba a los comerciantes locales, que con arreglo a la reglamentación sobre inspección de productos eran multados por comprar productos de calidad inferior. Sin embargo, sólo cuando vendían productos que habían sido adulterados deliberadamente podía perseguirse a los productores.
Las reglamentaciones de calidad exigían para su administración una constante vigilancia por parte del personal superior para evitar que se eludieran las normas. Algunos comerciantes podrían decidir comprar productos de calidad inferior a bajo precio a productores muy necesitados de dinero. Si se los descubría, tratarían de recurrir a sobornos. Sin embargo, es recomendable una cierta flexibilidad cuando se producen fuertes variaciones estacionales en los suministros. En épocas de escaseces, los comerciantes presionarán para que se atenúen las normas y poder disponer así de suficientes productos exportables para cumplir sus contratos. Una vez que la producción ha respondido a los precios favorables y que las cantidades exportables son abundantes, los compradores de ultramar se quejarán de defectos de calidad y recurrirán al arbitraje. La política que se aplicó fue insistir en el mantenimiento de las normas de calidad, pero autorizar asimismo la exportación de remesas limitadas de productos inferiores a las normas para cumplir determinados contratos con especificaciones de calidad inferior. Se consideró que esto era necesario para mantener la posición comercial de exportación y evitar una situación en la que los compradores se dirigieran a otras fuentes, incluidas las fibras sintéticas.
Los pesos y medidas utilizados en las transacciones comerciales eran inspeccionados. Los productos para consumo local se solían vender en vasijas o tazas. Minoristas poco escrupulosos demostraban una gran ingeniosidad reduciendo la capacidad de las medidas con falsos fondos que hacían difícil descubrir el engaño. Las balanzas eran muy costosas para su empleo general, y se intentó, aunque sin éxito, la introducción de recipientes de tamaño uniforme con la cantidad claramente señalada.
En el mercadeo nacional, la preocupación principal del gobierno era la distribución del arroz, que constituía el elemento principal de la dieta popular y era un argumento políticamente delicado. La producción del país variaba mucho de un año a otro. Alternaban los períodos de abundancia con precios bajos y los de malas cosechas con escasez y precios elevados. Todos los años, antes de la cosecha temprana, se producía una temporada de escasez y la población rural padecía la falta de alimentos. Una importante función tradicional del jefe supremo era almacenar existencias de arroz para su distribución durante esa temporada. A partir de 1900 se fue perdiendo esa función comercial de los jefes indígenas de las aldeas al tiempo que se ampliaban las actividades de los comerciantes libaneses; fue así que, frente a la escasez de arroz y precios elevados en 1954/55, se saquearon sus tiendas. En respuesta a este fuerte sentimiento local, el Departamento de Comercio e Industria realizó importaciones de arroz que distribuyó por conducto de comerciantes minoristas africanos. En general las importaciones se obtuvieron a precios muy bajos, lo que permitió al departamento acumular beneficios que se destinaron al desarrollo de la producción nacional y el mercadeo del arroz. Estas actividades se llevaron a cabo en consulta con un comité sobre políticas para el arroz y una asociación de vendedores de arroz, en representación de los minoristas.
La segunda intervención importante del Gobierno fue la creación de la Junta de Mercadeo de Productos de Sierra Leona. Su función consistía en garantizar precios mínimos al agricultor para los productos de exportación, su venta en las mejores condiciones posibles y el establecimiento de un fondo de reserva destinado a aliviar los efectos de los cambios bruscos de precios en el mercado mundial. Muchos funcionarios del gobierno, sin embargo, vieron en la función de la Junta un elemento de ayuda para ejecutar sus políticas de desarrollo. Estos funcionarios se inclinaban a mantener bajos los precios a los cultivadores, aun cuando los precios de exportación fuesen elevados, con objeto de disponer de fondos para otros fines.
En Sierra Leona, el mercadeo agrícola pasó a depender del Ministerio de Comercio e Industria, con el Ministerio de Recursos Naturales responsable de las actividades en la explotación. Sus funciones de mercadeo comprendian: controles y licencias de importación, regulación del comercio y mercados internos, inspecciones de calidad y de pesos y medidas, elaboración, una vasta operación de mercadeo, molturación y almacenamiento del arroz, y la promoción de las exportaciones. Pasó también a depender de dicho ministerio el desarrollo de las cooperativas, cuya actividad se alentó designándolas agentes de compra de la Junta de Mercadeo y prestándoles asistencia en la clasificación de sus productos.
Fue necesario organizar cursillos muy detallados y prácticos de capacitación y actualización para el personal dedicado a actividades de mercadeo, en particular en el área de inspección de productos. Se consideraba indispensable que alcanzaran niveles de competencia en manipulación de productos igual a la de los comerciantes y sus empleados. Una parte importante de su labor consistía en el asesoramiento y las demostraciones de prácticas adecuadas de manipulación de productos, por ejemplo, coser correctamente los sacos (con orejas para las almendras de palma y sin orejas para el cacao), la manipulación de pilas de sacos y la lucha contra la infestación. A lo largo de los años muchos comerciantes han manifestado su reconocimiento por estos servicios.
En las dos secciones precedentes se ha ilustrado la labor de departamentos estatales de mercadeo en dos países. En uno las empresas autóctonas de comercialización ya se hallaban bien establecidas y en el otro su función era sólo modesta. Esta sección trata ahora de ofrecer indicaciones sobre lo que puede hacerse en países donde el gobierno se encuentra ya abocado a las operaciones de mercadeo interno y de exportación, y donde éste fija los precios para la mayoría de los productos agrícolas.
República Unida de Tanzania. En 1970 se estableció en el Ministerio de Agricultura la Oficina de Desarrollo del Mercadeo con la asistencia de la FAO/ PNUD. Posteriormente recibió asistencia financiera del Banco Mundial. A partir de 1961, año en que alcanzó la independencia, la República Unida de Tanzania habla adoptado una política de socialismo y autoconfianza que, en materia de mercadeo agrícola, se centraba en organismos paraestatales y cooperativas. Esto suponía una carga muy pesada para el Ministerio de Agricultura responsable de la comercialización. Este ministerio tenía asignado un puesto en la junta de cada organismo paraestatal de mercadeo, se interesaba asimismo de las políticas de precios y tenía la responsabilidad de las cooperativas. En términos de personal, esto suponía un volumen de trabajo difícilmente soportable.
El programa de trabajo de la Oficina de Desarrollo del Mercadeo (ODM) comprendía:
En forma adicional, se encomendó a la ODM el seguimiento de las actividades de abastecimiento de alimentos. De los estudios sobre seguridad alimentaria que habla iniciado se derivó un programa internacional para la construcción de almacenes y la dotación de reservas iniciales.
Al multiplicarse los obstáculos y los déficit en el sector paraestatal, la labor práctica de la ODM aumentó en alcance y complejidad. La administración financiera y contable se convirtieron en sectores de interés crucial, importancia que creció con los significativos recursos de inversión que fueron destinados a los organismos agrícolas. La supresión de las uniones de cooperativas en 1976 y la estipulación de que los organismos agrícolas comprasen directamente en las aldeas supusieron una ulterior carga de supervisión para la ODM.
En una economía de este tipo, el problema que se plantea en la promoción de sistemas eficaces de mercadeo es la imposibilidad de establecer normas para medir el rendimiento de los organismos paraestatales, con referencia al de empresas que se hallan motivadas por las fuerzas del mercado y en las que la supervivencia equivale al éxito. A falta de iniciativas autónomas que produzcan nuevas ideas, el tipo de acción propuesta se reduce a la modificación del sistema existente. Una eficacia relativa se toma erróneamente como el único tipo de eficacia posible.
Hacia 1976, la ODM efectuaba un examen anual completo de los precios agrícolas. En él se analizaban con cierta profundidad todos los elementos que revestían interés oficial para la adopción de decisiones sobre precios al productor. Fue éste el primer intento relativo a la formulación de propuestas sobre precios en un estudio global equilibrado, en lugar de decisiones carentes de uniformidad respecto a los distintos cultivos.
La ODM, mediante su asesoramiento al Gobierno respecto a decisiones en materia de precios, despertó el interés por el impacto que los mismos podían tener sobre las organizaciones de mercadeo interesadas y una viva conciencia respecto de los efectos de la inflación. Esto se ilustra en los dos pasajes siguientes:
Más seria resulta la decisión del Gobierno de no seguir la recomendación de la ODM de diferenciar entre el sorgo blanco, que es de fácil aceptación para el consumo humano y el sorgo rojo que, con su alto contenido de tanino y sabor amargo sirve principalmente como ingrediente en el sector tradicional y moderno de la fabricación de cerveza y también para piensos. Para cl arroz blanco se recomendó el precio de 130 c/kg con una prima de 30 c/kg para Mwanza, Mara y Shinyanga, mientras que el precio del sorgo rojo debía quedar inalterado en términos monetarios en la cifra de 100 c/kg. Aunque la Compañía Nacional de Molturación no lleva cifras separadas para uno y otro sorgo, se estima que la mayoría de sus compras corresponden al sorgo rojo, que da un mayor rendimiento y ofrece menor riesgo. Es probable que el precio anunciado para el sorgo en 1982/83 determine compras de cereal rojo muy por encima de las necesidades del mercado nacional. Es de prever que dicha compañía tendrá su capacidad de almacenamiento totalmente ocupada por este producto, y fuertes pérdidas financieras por averías en almacén y exportaciones ruinosas, como ocurrió en 1978/79.
Se recomendó que cl precio al por menor de los frijoles pasase de 350 a 480 c/kg (calidad I) y de 275 a 380 c/kg (calidad II) con objeto de mantener el ingreso real de la producción a un nivel en torno al actual. Se recordará que el precio actual al productor para los frijoles se ha mantenido inalterado desde 1977/78, en que se inclinó probablemente con exceso a favor del productor. Se estima que el descenso en el valor real de aproximadamente el 30 por ciento, que supone un precio monetario inalterado, tendrá un notable efecto negativo en las compras de la compañía. Por consiguiente, es probable que la disponibilidad de frijoles para su venta por la compañía en 1982/83 no satisfaga la demanda, que en 1980/81 determinó la venta de 25 000 toneladas por dicha compañía.
Una nueva consideración prioritaria en materia de mercadeo en aquel momento fue el costo del combustible. Más del 50 por ciento de los ingresos de exportación del país se destinaban a la importación de energía. El volumen y los precios de los cultivos de exportación se mantenían principalmente estáticos, o incluso descendían. Las necesidades de transporte se convirtieron en un grave problema. Otro aspecto fuertemente cuestionado era la viabilidad de seguir determinando los precios para todo el territorio con arreglo a principios socialistas.
Kenya. Una consideración de vital importancia cuando se prestan servicios a un gobierno es la presentación de resúmenes consultivos en los que se indiquen claramente:
La falta de una exposición clara de estos elementos, con frecuencia ha determinado que por razones de políticas se descuidara la realización de estudios importantes sobre cuestiones de mercadeo. Así sucedió durante algún tiempo en un Centro de Desarrollo del Mercadeo creado con el apoyo de la FAO/PNUD en Kenya, donde se realizaban interesantes estudios sobre mercadeo. Sin embargo, se mantuvieron en un nivel tal que se prestaba más a una tesis doctoral que a un informe ministerial. No eran leídos por los funcionarios interesados que debía tomar las decisiones, por lo que el centro tuvo escasa repercusión. Cuando éste pasó a preparar informes breves y claros, sólo con la información y antecedentes indispensables, inmediatamente cobró influencia y creció su función consultiva. Se reproducen algunos fragmentos tomados de una declaración oficial sobre política alimentaria nacional, redactada por el Centro de Desarrollo del mercadeo y aprobada por el Gabinete de Ministros, que demuestran el enfoque:
La rápida expansión prevista en la producción alimentaria, junto con el aumento en el movimiento interregional, de las zonas excedentarias a las deficitarias que se producirá en el próximo decenio, impondrá un gran esfuerzo a los sistemas de mercadeo y distribución. La expansión de los servicios necesarios estará en relación mucho más estrecha con el crecimiento previsto de la población urbana del 9,6 por ciento anual que con el crecimiento demográfico global del 4,0 por ciento anual. Se ejecutará un programa general para ampliar los medios de mercadeo y modificar algunas políticas a fin de mejorar la eficacia del sistema y poder así hacer frente a semejante desafío.
Las restricciones actuales sobre los movimientos intercomarcales e interregionales de maíz y otros productos obstaculizan la eficaz distribución nacional por parte de los comerciantes privados y aumentan los costos de mercadeo y los precios al consumidor. En diferentes partes del país se han verificado al mismo tiempo escaseces y abundancias de existencias, y se ha abusado de las restricciones. El objetivo a largo plazo que se define en el Plan de Desarrollo actual, consiste en simplificar el sistema de mercadeo eliminando esas restricciones artificiales al movimiento de productos y recurriendo a la Junta Nacional de Cereales y Productos como vendedor y comprador en última instancia.
Tan pronto mejore la situación del abastecimiento de maíz, se repongan las existencias comerciales de la Junta y se cree una reserva nacional estratégica de cereales, Irán eliminándose progresivamente las restricciones del mercado interno. Para algunos productos secundarios, en que dicha Junta representa una pequeña proporción del mercado total, se retirarán dichas restricciones.
En la actualidad, los agricultores y comerciantes carecen de suficiente información sobre los precios que rigen en otros mercados y sólo conocen el precio de compra de la Junta, que se anuncia cada año. Esta falta de información expone a los agricultores a la explotación y aumenta los riesgos que corren los comerciantes y, por ende, su margen necesario. Para superar este problema, el Ministerio de Agricultura ha comenzado a compilar diariamente los precios de los cereales y productos hortícolas en los mercados de Mombasa, Kisumu, Nakuru, Limuru, Thika, Eldoret, Byeri, Karatina y Machakos. Estos precios seguirán siendo comunicados por radio, todos los días por lo que se refiere a los productos hortícolas, y semanalmente para los cereales.
Los informes comerciales básicos del Centro de Desarrollo del Mercadeo, para el examen de los precios agrícolas de 1981/82 adoptan la forma siguiente, por producto:
Maíz: situación del mercado internacional-producción, datos y comentarios, datos de exportación y comentarios, estimaciones de la oferta total, perspectivas de precios; situación del mercado local-tabulación de la producción y compras de la Junta en los últimos años.
El maíz que no se retiene en la explotación se vende a los comerciantes en el «sector informal», a las cooperativas, o directamente a los consumidores, o se comercia a través de la Junta o de sus agentes. El precio de compra de la Junta para el maíz se ha aumentado en las últimas cuatro campañas (1980-84) y la Junta ha emprendido un programa para consolidar los arreglos comerciales con el establecimiento de una serie de centros de compra en las principales zonas cosecheras de maíz. Las compras y ventas de maíz proyectadas de la Junta en 1982 suponen un déficit para el año de 170 000 toneladas. Para cubrir dicho déficit y reponer las existencias de la Junta de forma que lleguen a un nivel operacional mínimo de 190 000 toneladas, será necesario importar 240 000 toneladas. Al precio actual del mercado mundial de unos 170 dólares c.i.f. Mombasa, supondría aproximadamente 415 millones de chelines si la compra se realiza sobre una base comercial.
En la fecha en que se preparó este resumen informativo, el Centro de Desarrollo del Mercadeo preparaba documentos para el Gabinete a un ritmo de uno semanal y era consultado casi diariamente por las diversas secretarías permanentes y altos funcionarios.
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